Saturday, January 26, 2008

Hoy vuelves a esconderte bajo tu pañuelo verde y morado. Yo tras el cristal, parezco no importarte mientras caminas dando esos pequeños saltitos que te hacen tan pequeña, tan dulce.

Yo sigo donde ayer, de veras. Sigo sirviendo cafés en la parte más esquinada de la ciudad. Justo donde dobla tu calle. Allí me sentí como en casa antaño. Pero hoy, hoy cambio para siempre. Cambia la dirección y el sentido de mis pasos. Cambian las paredes donde me siento atrapado. Cambian sus sombras que apuntan a otro.

Seguramente acabarás dictando las normas que hoy te asustan. Jamás volverás a creer en el partido comunista. Creerás haber crecido. Pensarás que lo difícil es utópico. Que no vale la pena luchar. Que es mejor estar sola. Y que hiciste bien en abortar.

Entonces, sé que romperás a llorar. Ya no podrás ocultar tu agonía y recordando nostálgica tu época universitaria notarás que aquella vitalidad está posada en tu rostro en forma de arrugas que descansan para no marcharse jamás. Y que la casa que habitas, ya no es un sueño, sino una condena.

Yo no estaré para verlo, porque ya no hay cristales. Olvidaré tu dirección y que me hiciste el amor durante tres semanas seguidas en cualquier rincón y excusa que encontrábamos. Las luces tenues no dejarán de recordarme a ti más que un mes, pero no más.

Por eso, he decidido escribirte hoy que aún podría esbozar tu perfil con trazos gruesos y finos, con detalles y abstracción. Me quedo con tu juventud y tus pequeñas locuras ahora que todavía existen. De todo lo demás, no me preguntes mañana.

2 Comments:

At 6:10 AM, January 29, 2008, Blogger Tukamán said...

loko, esa mujer te tocó. Amén si te tocó.

Me ha gustado tu melancolía. Son cosas raras y no por ello menos desagradables.

Ahora toca pensar en metas diferentes.

Un besazo de tu amigo y compañero de crecepelo, Ruly (o Raluý en los circos)

 
At 4:06 AM, March 23, 2008, Blogger CARLA said...

oye cambiame el link!!!

 

Post a Comment

<< Home